¿Gripe? Combate este y otros males con los beneficios del jengibre
El jengibre ha demostrado tener múltiples beneficios para la salud, desde propiedades antibacterianas, hasta controlar el colesterol. Te contamos de este super ingrediente.
Lo que se consume del jengibre, planta milenaria de origen oriental, es su rizoma, una pequeña raíz de color café que se encuentra en los supermercados.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural comparte que el jengibre es una planta que goza de propiedades medicinales. Por ello, durante época de frío, es común escuchar recomendaciones de tés naturales de jengibre para evitar resfriados.
No obstante, el jengibre presenta más beneficios para la salud que la mayoría de las personas desconoce. Aquí te explicamos ese y otros beneficios relacionados con esta raíz.
Mejora la digestión y reduce las náuseas
Con el paso de los años, las personas comienzan a tener problemas digestivos debido al aumento de reflujo y la reducción de secreción de sustancias en el esófago.
Sin embargo, el jengibre reduce la presencia de gases y contribuye a proteger la mucosa gástrica. Esto ayuda a mejorar el sistema digestivo, y a su vez, la sensación de náuseas.
La AARP, una organización sin fines de lucro para adultos mayores, explica que su efecto sobre el mareo se debe a su acción sobre los químicos que intervienen en la función del sistema nervioso.
Ayuda en los efectos secundarios por quimioterapia
La Fundación Iberoamericana de Nutrición comparte que, a través de una revisión sistémica y metanálisis de la ingesta de jengibre, se conocen los beneficios de esta planta para pacientes en quimioterapia.
Las personas que reciben este tratamiento pueden presentar numerosos efectos secundarios, entre los cuales destaca la fatiga, náuseas, vómitos y dolor.
La evidencia de la investigación demuestra que la suplementación con jengibre puede reducir la incidencia de vómitos agudos inducidos por la quimioterapia. Asimismo, algunos estudios demuestran que el jengibre ha resultado beneficioso contra el cáncer de colón.
Combate los resfriados
Esta planta de origen oriental ha mostrado tener actividades antivirales contra el virus sincicial respiratorio, conocido como el causante del resfriado común en adultos, bebés y niños.
El jengibre fresco inhibe la formación de una placa sobre el recubrimiento de las vías respiratorias. Así, ayuda a las células de la mucosa a combatir el virus. Pruébalo en té o en infusiones, combinado con cítricos como el limón y el poder del endulzante de la miel.
Ayuda a disminuir los síntomas de artritis
En el caso de los adultos mayores, el número de radicales libres en el cuerpo aumenta. Es decir, estas moléculas inestables se intensifican y pueden dañar las células en el cuerpo.
La contribución del jengibre es que, al reducir el efecto nocivo de los radicales libres, contribuye a contrarrestar los efectos negativos del estrés oxidativo en el cuerpo, además, reduce el dolor y la hinchazón por la artritis. Todo esto, gracias a su efecto antioxidante y propiedades antiinflamatorias.
Controla el colesterol
En pacientes con niveles elevados de grasa en sangre, estudios demostraron que el jengibre reduce triglicéridos, colesterol y lipoproteínas de baja densidad, conocido como “colesterol malo”.
Investigaciones demuestran que el efecto se da mediante la inducción de ácidos biliares para reducir la síntesis del colesterol.
¿Cómo consumirlo?
Existen varias formas de añadir jengibre a tu dieta diaria; sin embargo, su consumo puede generar la elevación de la temperatura corporal, por lo que no se recomienda en pacientes con fiebre.
Dicho esto, se aconseja ingerir el jengibre en su forma natural. Algunas opciones son en jugos, licuados, infusiones, aderezo para ensaladas, salsas y postres.
Debido a su intenso sabor, recuerda ajustar la cantidad deseada para no opacar otros sabores. ¡Cuéntanos en redes sociales de qué forma lo cocinarás!
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