Casa Madero celebra más de mil medallas internacionales para el vino mexicano
A lo largo de la historia, la vinícola mexicana Casa Madero ha recibido más de mil medallas internacionales; para celebrarlo, lanzó la nueva campaña: «Más de mil medallas, más de mil historias»
Fue en el año 1989 cuando Casa Madero ingresó a sus primeros concursos internacionales en Inglaterra, país donde obtuvo sus primeras medallas de oro. Desde entonces, esta casa vinícola ha logrado posicionar al vino mexicano en la mira de todo el mundo.
La campaña «Más de mil medallas, más de mil historias», busca representar el compromiso por fortalecer y acelerar el crecimiento de la industria vinícola mexicana, para continuar poniendo en alto al vino nacional y a sus productores. Entre sus objetivos también está posicionar a México como uno de los productores de vino más importantes del mundo.
Trayectoria destacada
Casa Madero ha sido reconocido en 21 países, dentro de los concursos más prestigiosos del mundo. Algunas de las medallas que ha obtenido son: las Preseas doble Oro en Vinus Argentina; premios Gran Oro en Vinitaly Italia; menciones especiales como Mejor Vino de la competencia en Vinalies Internationales Francia; Vino Revelación en Concours Mondial de Bruxelles, y Best of Show en Mundus Vini Alemania. Además de medallas de oro en países como España, Portugal, Suiza, Holanda, Canadá y Japón.
Detrás de las más de mil medallas hay grandes historias que contar, y para celebrar este logro, Casa Madero reunió a nueve destacadas personalidades de la industria del vino: Jesús Diez, Carlos Borboa, Karla Sentíes, Luis Morones, Manuel Orgaz, René Rentería, Rodolfo Gerschman, Sandra Fernández y Víctor Absalón, quienes en entrevista cuentan cómo Casa Madero ha influido en sus carreras profesionales a lo largo de los años, los concursos en donde han visto triunfar a estos vinos y lo que los caracteriza para estar a la altura de cualquier competencia en el mundo.
A lo largo de este tiempo, Casa Madero ha demostrado liderazgo, constancia y calidad en la producción de sus vinos. Esta vinícola mantiene como filosofía proteger el conocimiento acumulado durante más de 424 años de historia, con especial atención al detalle, cosecha tras cosecha.
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