¿Intoxicación por alimentos? Evita las enfermedades estomacales en la temporada de calor

Las enfermedades estomacales ocasionadas por la temporada de calor y las malas prácticas en la cocina, son más comunes de lo que pensamos. Aquí te decimos cómo evitarlas.

Ya sea en casa o en algún restaurante, la cocina es un espacio que debemos cuidar para evitar enfermedades gastrointestinales. Las malas prácticas en la manipulación, el manejo incorrecto de temperatura y la mala preparación de los alimentos, pueden ser algunos causantes del problema.

La Organización Mundial de la Salud comparte que la contaminación por sustancias químicas puede provocar intoxicaciones agudas o enfermedades de larga duración. Por otro lado, las enfermedades transmitidas por alimentos pueden causar discapacidad persistente y, en el peor de los casos, la muerte.

Te contamos cinco errores en la cocina que puedes evitar para prevenir enfermedades estomacales, en temporada de calor.

Descongelar alimentos a temperatura ambiente

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), dicta que la forma correcta de descongelar los alimentos es colocándolos en la parte del frigorífico para que no pierda la cadena de frío. Este proceso puede ser con 12 horas de antelación y sobre una bandeja o plato, para evitar la contaminación cruzada.

Otra opción es cocinarlos congelados directamente, como verduras y productos precocidos. Este último método solo debe utilizarse cuando la etiqueta de los alimentos lo indique.  

Por lo tanto, no es recomendable descongelar los alimentos a temperatura ambiente. Esto, debido a que pueden alcanzar temperaturas entre 5º y 65ºC, lo que pone en riesgo la seguridad del alimento. Ya que, microorganismos como la Listeria, Salmonella o bacteria E podrían reproducirse.  

Romper el huevo directamente en la comida

Otro de los errores comunes que cometemos es romper la cáscara de huevo directamente en el plato o sartén.

La razón por la que esto es peligroso es debido a que la bacteria Salmonella podría estar presente en la cáscara. Es decir, si al cocinar, se rompe la cáscara y cae un trozo en la comida, ésta puede contaminarse.

Debido a ello, los expertos recomiendan romper la cáscara de huevo encima de una mesa, o bien, en un plato a parte, romperlos y asegurarse que no quede ningún trozo.

Lavar el pollo

La mayoría de las personas piensan que la mejor forma de lavar la carne cruda es directamente en la tarja o fregadero con el agua del grifo.

El riesgo de esto es que, en cuanto el agua esté en contacto con el pollo y éste se encuentre contaminado, el agua podría salpicar otras superficies u alimentos y contaminarlos con las bacterias del pollo crudo.

Por ello, la manera óptima y correcta de eliminar bacterias es a través del proceso de cocción. Cabe resaltar que es de suma importancia cocer correctamente el pollo y no consumirlo crudo, pues podría ser la causante de contraer Salmonella u otras enfermedades.

Desinfectar las frutas y verduras de forma incorrecta

Asimismo, para tener un mejor control de higiene dentro de la cocina, es importante desinfectar de manera correcta las verduras y frutas.

En un trabajo de investigación, el Ministerio de Agricultura de Chile expone que las verduras y frutas deben lavarse directamente bajo el chorro de agua de la llave una por una y frotarse entre sí.

Sin embargo, también es recomendable desinfectarlas, de la siguiente forma: verter una cucharadita de hipoclorito de sodio en tres litros de agua potable; luego, sumergirlas de entre dos a cinco minutos y, por último, enjuagarlas con abundante agua y secarlas.

De lo contrario, podrías intoxicarte con Botulismo, E. coli, Hepatitis A y Listeria.

Mal uso de utensilios de cocina

Por último, la contaminación cruzada, o el mal uso de utensilios de cocina, es un ejemplo de malas prácticas dentro de la cocina que desencadenan enfermedades.

Ésta se produce cuando los microbios patógenos, bacterias u otras sustancias, se transfieren de forma no intencional a un alimento. Puede ser a través de las manos, cuchillos, trapos, tablas para cortar y otros alimentos, etcétera.

Por ejemplo, el contacto directo entre un producto crudo y cocinado, puede ser la causante de contraer Salmonella u alguna otra enfermedad. Esto pasa debido a que no se categorizan los utensilios para crudos y cocidos.

El mismo caso es con los trapos de cocina y tablas para cortar, cada una debe de estar categorizada por alimentos crudos y cocidos; asimismo, tener distintas para diferentes alimentos: verduras, carne, pollo y pescado. Ahora ya lo sabes, evita estas enfermedades ocasionadas por el calor con estos consejos.