Los postres más icónicos del mundo

Cada país cuenta su propia historia a través de sus postres, algunos más famosos que otros, pero todos parte importante de los lugares. En ellos se muestran los ingredientes locales o algunos lugareños que los crearon por error. Recorramos el mundo y su historia.

Por Gaby Vázquez

Cheesecake (Grecia/Estados Unidos)

Aunque este postre lo asociamos con todo un estilo que se formó en Nueva York, su origen se remonta a miles de años atrás en Grecia. Hay escritos que dictan que en aquel país se hacía ese pastel con queso triturado, miel y harina en una cacerola de cobre desde el 230 de nuestra era. La receta fue compartiéndose por toda Europa para finalmente llegar a Estados Unidos.

Ya en el país norteamericano, un fabricante de quesos se equivocó y creó un queso suave y cremoso. Lo que favoreció para que cada cafetería tuviera su propia versión del pastel de queso, hasta que el joven alemán Arnold Reuben consiguió su propia versión. A esta última se le conoce como el cheesecake estilo Nueva York. Si ya se te antojó, te dejamos la receta de la chef Paulina Abascal.

Baklava (Turquía/Medio Oriente)

Es el postre más famoso de Turquía, pero también se encuentra en Medio Oriente y Grecia. Son capas de masa filo intercaladas con frutos secos picados como pistaches o nueces, bañados en miel. La receta original dicta que son 40 capas de masa por los 40 días de ayuno y solo se comía en pascua. Poco a poco, el postre se volvió tan popular que lo encuentras cualquier día de la semana. Se cree que los asirios fueron quienes crearon este postre al combinar masa de pan con nueces y bañadas en miel.

Alfajor (Argentina/Latinoamérica)

Este postre se encuentra en muchos países de Latinoamérica, pero el más popular es Argentina. Los alfajores provienen de España y en Sudamérica se popularizó en el periodo colonial. Con el tiempo adaptaron sus propias recetas. Son dos pequeñas galletas circulares que se rellenan de algún dulce, como el típico dulce de leche o mermelada, incluso helado.

Pastel Sacher (Austria)

La historia comienza con Franz Sacher, que era aprendiz de cocina, y tuvo que preparar un postre para el príncipe Clemens Wenzel Lothar von Metternich. La oportunidad se dio cuando el jefe de cocina enfermó y era momento de que el aprendiz se luciera. El aprendiz presentó una variación del clásico pastel de chocolate al que le agregó mermelada de albaricoque. El postre fue tan increíble que se le conoce como Sacher en honor a su creador (aunque en alguna época existió una pelea legal por el nombre y quien era el dueño), la receta que conocemos hoy en día, la perfeccionó su hijo mayor, Eduard Sacher.

Tarta Santiago (España)

Originaria de Galicia, esta tarta está hecha de almendras molidas, huevo, azúcar y ralladura de limón. Se dice que esta tarta al principio se hacía con harina, pero hoy en día en la receta se omite ese ingrediente. Es la tarta que se consume por los peregrinos —y turistas— que llegan a Santiago de Compostela y se dice que la forma de la cruz la obtiene después de que José Mora, fundador de Casa Mora, buscó una manera de distinguir este famoso postre, así todos alrededor comenzaron a copiar la idea.

Recorre el mundo a través de sus postres que engalanan las comidas y satisfacen el antojo de cualquier persona.